Aplicación controlada de temperatura previa y/o posterior a la soldadura, que mejora la calidad de la unión soldada y aumenta la resistencia del metal contra cargas, impactos y corrosión. Esta aplicación de temperatura se realiza en forma programada y controlada, durante un tiempo determinado, respetando las normas específicas con una gradiente adecuada para cada aleación y/o pieza en particular. Los tratamientos térmicos deben aplicarse a estructuras o piezas sometidas a esfuerzos físico-químicos, como estanques de presión, tuberías, estructuras industriales, repuestos mecánicos, y también en el caso de piezas o estructuras que deban ser mecanizadas posteriormente.
BUNSA puede garantizar la calidad y precisión del tratamiento térmico realizado, según las especificaciones de cada trabajo, con un registro gráfico permanente de temperatura.
Beneficios del tratamiento térmico:
-Economía: las piezas soldadas serán más resistentes y durables al cumplir con las exigencias térmicas indicadas en normas internacionales.
-Seguridad: el tratamiento térmico reduce sustancialmente el riesgo de fracturas o colapso de estructuras sometidas a grandes esfuerzos mecánicos.
-Tecnología: facilita la aplicación de soldadura en aleaciones complejas, mejorando la estructura metalúrgica de los aceros intervenidos.